En Cinta Domingo, 4 septiembre 2016

«La señal» es un documental que conquistó el corazón del público en el último Festival de Lima

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Imagen: Vía Expresa Cine y Video

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Entrevista de: Alberto Castro (@mczorro)

Cuando «La señal», documental peruano de Leandro Pinto, se alzó con el segundo puesto del Premio del Público del último Festival de Lima, todos quedamos sorprendidos. Y es que este trofeo de preferencia popular suelen llevárselo los relatos de género o aquellos títulos que generaron más expectativa dentro de la competencia oficial, mientras que «La señal» era un documental presentado fuera de competencia (en la sección Hecho en el Perú) y del que muy poco se sabía antes de su estreno. ¿Qué fue lo que pasó? Que la gente se enganchó y conmovió con este retrato de alumnos y profesores en una escuela rural ubicada en la Reserva Nacional de Salinas y Agua Blanca, a 4.500 msnm, en Arequipa.

El realizador nos contó que había estado buscando colegios alejados de la ciudad para otro proyecto, cuando decidió emprender el suyo propio:

Me pasé medio año buscando escuelas rurales para un trabajo que me había encargado el Departamento de Educación del Gobierno De Navarra, cuyo objetivo era estimular a sus alumnos españoles a asistir al colegio, a que entendieran que al otro lado del mundo había gente que la tenía mucho más difícil. Y el ángulo que querían mostrar era el de ‘pobrecitos esos estudiantes’ y yo no quería eso. Porque me di cuenta de que no eran ningunos ‘pobrecitos’: son alumnos bilingües, que arrean 500 cabezas de ganado solos con un perro. Son gente que posee un conocimiento que no reconocemos lo suficiente. Por poner un ejemplo, el Estado que no llega con salud a estos lugares ha hecho que las comunidades mantengan una tradición herbomedicinal, natural del lugar. Y son cosas que deberían estudiarse en nuestras universidades. Son cosas científicas que están sucediendo aquí no más, que no podemos ignorar. Se está desperdiciando mucho de este conocimiento.

El documental pone énfasis en ese conocimiento alternativo adicional que tienen los estudiantes de escuela rural, que tal vez los citadinos nos hemos perdido. Son niños que saben mucho más de animales y plantas que la mayoría de nosotros, incluso aprenden sobre la reproducción a muy temprana edad, ya que lo ven de cerca en la crianza de su ganado. Son hijos de campesinos, cuyos padres quisieran que los superen y que tal vez abandonen el campo en algún momento, pero que no se acomplejen con la ciudad, que no se contaminen con lo ‘moderno’ y olviden por completo lo natural.

«La señal» también pone énfasis en lo lúdico. Las viñetas de realidad y registro de muchas de las clases se combinan con animaciones de dibujos hechos a mano o muñequitos de plastilina modelados por los mismos alumnos, a través de los cuales conocemos sus universos personales, aspiraciones y la forma en la que ven el mundo. El aprendizaje se nos presenta como un juego:

Cuando estos alumnos tienen que salir al recreo, salen a trepar los cerros. Y ahí el profesor le sigue dando clases. Les dice: ‘A ver, junten piedritas. ¿Cuántas tienen ahí? ¿Y cuánto suman con las que hay aquí?’ Matemáticas. ‘¿Y cómo se llaman este cerro? ¿Y pasan las vicuñas por aquí?’ Todo el tiempo enseñando, mientras juegan. El documental quiere tener esa estética de juego. Les dije a todos los del equipo que quería que jugaran con todos los equipos que teníamos.

Además de los 18 alumnos a los que seguimos, el documental funciona también como un homenaje al profesor Julio Machaca, quien tuvo que adaptar sus métodos de enseñanza a estos niños y el entorno en el que viven.

Durante el Festival de Lima pensaba que todos deberían sacarse fotos con él y no conmigo: él es el héroe de esta historia. Y la gente que ha visto la película ha quedado muy conmovida con su historia. Ahora puedo irme tranquilo sabiendo que logramos hacerle un homenaje al profesor Julio, que la gente ve reflejado en él un atisbo de cómo se debe ser. Un modelo, un líder, un símbolo. El documental te hace pensar en todas esas veces que rajaste de la educación viendo reportajes en un noticiero, pero en realidad estás rajando de la educación en la ciudad. Hay una completa ignorancia de lo que sucede en otros lugares, en un país que es excesivamente diverso, que demanda un montón de pequeñas atenciones diferentes.

Imagen: Festival de Lima

Leandro Pinto (director), Julio Machaca (profesor protagonista de la cinta) y Miguel Barreda (productor) se pasearon por el Festival de Lima presentando el documental. Imagen: Festival de Lima

¿Y cómo hacemos para ver este documental? Por el momento, nos queda esperar. El realizador confirma un acuerdo con el Grupo Chaski, el cual pasará la cinta en toda su red de microcines, que tiene salas en todo el país:

Hay gente que camina 20 kilómetros para ver una película en estas salas: eso vale más que 20 soles de una entrada en una cadena de la ciudad.

También hay un compromiso del gobierno regional de Arequipa para apoyar la distribución del documental en toda la región. Y esto queremos presentarlo como piloto al Ministerio de Educación para replicarlo a nivel nacional. Queremos también pasar el documental en los colegios públicos por las mañanas, aunque para eso necesitamos una inversión adicional. Y hay un plan de estrenar el documental en el Malba (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires), porque dentro del museo dictan talleres para niños. Entonces la idea sería que los niños vean la película y luego repliquen alguno de los talleres que vieron en pantalla. Y nos han ofrecido hacerlo en la red de museos que tienen en Latinoamérica, en Sao Paulo, en Ciudad de México, en Santiago de Chile. Sería genial.

Y si bien será difícil que «La señal» consiga un estreno comercial, ojalá que pueda exhibirse en canales alternativos pronto, ya sea en pantalla grande o distribución casera. Se trata de un documento importante para continuar el debate sobre la situación educativa en nuestro país, cuyas múltiples realidades geográficas y socioculturales hacen imposible hablarlo de una forma homogénea y hermética. No hay una sola respuesta en la educación, se necesitan varias. Ojalá que las encontremos pronto.

Imagen: Festival de Lima

«La señal» fue la segunda película preferida por el público en el Festival de Lima. La primera fue la también peruana «La última tarde». Imagen: Festival de Lima

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