Todos amamos (y estamos hartos de) Johnny Depp

Escribe: Omar Cáceres

¿Qué está pasando con Johnny Depp? Empezó como una estrella juvenil en los 80s por «21 Jump Street», convirtiéndose rápidamente en el actor que directores de la talla de Oliver Stone, Emir Kusturica, Jim Jarmusch , Terry Gilliam o Tim Burton se peleaban por tener en los 90s por su excentricidad y habilidad camaleónica, hasta consagrarse como el monstruo taquillero de los 2000s (la saga de «Piratas del Caribe» y «Alicia en el País de las Maravillas» como sus principales estandartes). Pero en los últimos años ha devenido en sinónimo de incertidumbre, no solo escogiendo proyectos de dudosa calidad («The Rum Diaries» y «Transcendence» nos dejaron con la ceja levantada) sino que hasta parece haber perdido posicionamiento con el público («El Llanero Solitario» y «Mortdecai» han representado pérdidas monetarias importantes para sus respectivos estudios). ¿Dónde quedó el que en algún momento fue considerado el mejor actor de su generación?

Igual resulta interesante revisar su carrera, con todo y altibajos, con todo y propuestas que buscan explotar sus capacidades y otros proyectos que prefieren usarlo de imán de taquilla. Es por eso que me animé a escoger 5 papeles que nos muestran su mejor cara, así como 5 de lo peor que ha podido ofrecernos. No está «El Joven Manos de Tijera», ya que es la respuesta más obvia. Hay que mencionar también el trabajo vocal que realizó para las películas animadas «Rango» y «La Novia Cadáver», ambas extraordinarias.

Las buenas

1. «Dead Man» (1995)

Una de las performances más extrañas que nos ha regalado el actor en su carrera, claro que todo tiene sentido cuando vemos que Jim Jarmusch estuvo detrás de cámaras. Estamos frente a un western acid-rock psicodélico según el mismo director, uno que fue filmado en un polvoriento blanco y negro, en el que se nos cuenta cómo un contador apacible y sociable se transforma en un despiadado asesino. Si, todo en el lejano oeste. Depp retrata perfectamente a ese hombre que desciende a los infiernos, que bebe de la cruda realidad a la que se enfrenta, mezclando la sangre con dulces melodías de Neil Young.

2. «Ed Wood» (1994)

Esta debe ser su mejor colaboración con Tim Burton, el padrino de su carrera y responsable del posicionamiento freak del actor hoy en día. Sí, estamos ante una película incluso superior a la entrañable «El Joven Manos de Tijera». Se trata de un tributo al cine de serie B del que es considerado el peor director de la historia: Ed Wood, fascinado por la ciencia ficción y el horror de bajo presupuesto. A pesar de su fracaso comercial, se ha convertido con con el tiempo en una obra de culto. Cabe recordar que esta película le valió un Óscar como Mejor Actor de Reparto al enorme Martin Landau, gracias a su caracterización de Béla Lugosi.

3. «Fear and Loathing in Las Vegas» (1998)

Si eres periodista o aspiras a serlo, es tu deber ver esta película. Retrata de gran manera lo que se conoce como el periodismo gonzo, el del periodista convirtiéndose en personaje activo de la noticia, justamente basado en una novela del padre de aquella corriente, Hunter S. Thompson. El talento de Depp es llevado al extremo en esta película gracias al punche de Terry Gilliam como director, claro: ¡cómo extrañamos estos papeles suyos! Otro fracaso de taquilla que se convertiría en película de culto con el tiempo. Por cierto, Benicio del Toro también está tremendo aquí.

4. «Descubriendo Nunca Jamás» (2004)

Una de mis películas favoritas del actor, curiosamente por mostrarnos una cara inusual en su carrera: una más normal. Y es que Johnny Depp se ha caracterizado por roles más alocados, bizarros, extremos, donde su ingenio y carisma provocan risa, pero pocas veces lo hemos visto tan dramático y efectivo como aquí. No tenemos un personaje exagerado ni maquillaje o vestuario que lo esconda, solo los matices suficientes para darle profundidad a la historia de J.M. Barrie, el escritor que, a partir de un amor platónico y la relación con un niño, creó a Peter Pan.

5. «Enemigos Públicos» (2009)

Su mejor performance en la última década, tal vez, gracias al lúcido Michael Mann detrás de las cámaras, quien le permite interpretar a uno de los ladrones más temidos y peligrosos de la época de la Gran Depresión Norteamericana: John Dillinger. Ayuda también el duelo actoral al que lo somete Christian Bale y el contrapeso emotivo de Marion Cotillard. Su misión era complicada: hacer que el espectador congenie con el que se supone es el malo de la película, algo que logra gracias al carisma y la humanidad que le imprime.

Las malas

1. «La Cara Oculta» (1999)

¿Qué pudo haber estado pensando Johnny Depp para aceptar interpretar a un hombre que en una misión fallida en el espacio termina siendo poseído por un extraterrestre? Dinero, por supuesto, pero el problema es que esta película terminó siendo uno de los peores fracasos taquilleros de su año. Duele incluso más verlo en pantalla gigante maltratando psicológicamente a su esposa, interpretada por Charlize Theron. No por nada es la única (y última) película que Rand Ravich dirigió, se quedó sin chamba luego de esto.

2. «La Última Puerta» (1999)

Resulta raro encontrar a una película de Roman Polanski en la esquina de las malas. Y es que estamos ante una de las peores decepciones de su carrera, uno con un guión casi risible, a pesar de que el realizador hace lo que puede por crear cierto clima de tensión y angustia. La actuación de Depp no ayuda mucho. Interpreta a un librero en busca de una misteriosa obra escrita por el mismísimo Satán. El terror que se intentaba consumar brilló por su ausencia.

3. «The Libertine» (2005)

Una de las películas más aburridas del actor, de esas que inducen al sueño incluso. Interpreta a John Wilmot, segundo conde de Rochester, destacado poeta, dramaturgo, soldado y cortesano, mujeriego, hedonista y libertino, cuya peculiaridad lo hizo un personaje influyente del siglo XVII. ¿De qué trata la película? Es difícil explicarlo porque el enredo narrativo al que nos somete el director no deja nunca de confundirnos. Y sí, Depp nos regala su dosis habitual de rareza, pero no resulta remotamente suficiente.

4.- «La Ventana Secreta» (2004)

Mucho antes de «Mortdecai», comedia negra que acaba de ingresar a nuestra cartelera, el actor ya había colaborado con su director David Koepp en este supuesto thriller, una flojísima adaptación de un libro de Stephen King. Aquí interpreta a un escritor afectado psicológicamente por la infidelidad de su esposa y por un bloqueo creativo. Si en esta primera colaboración el resultado no fue el óptimo, ya suponemos por qué la crítica le está dando con tanto palo al más reciente estreno.

5. «Piratas del Caribe: En Mareas Misteriosas» (2011)

Jack Sparrow fue el papel que lo convirtió en un actor que podía convocar un billón de dólares en taquilla a nivel mundial, pero también el que más le ha costado sacarse de encima, el que lo ha encasillado. Y en esta cuarta parte nos regala más de lo mismo, más de la caminada chueca, del exceso de muecas y del payaso que juega al humor físico porque ya. Ni un director especializado en los musicales como Rob Marshall pudo ser efectivo en la apuesta visual, ya que la historia es para el olvido. Y amenazan con regalarnos más aventuras de nuestro ex-pirata favorito: para el 2017 podemos esperar la quinta parte.